Desaparecido, ¿Dónde andas que aquí no andas?

Desaparecido...
Desaparecido… – Imagen de hoy @lattefarsan

Y si… En los últimos días me consideran desaparecido. Me han hecho una pregunta constante a través de redes sociales -principalmente-: ¿En dónde andas que aquí no andas?  Pues… ciertamente aquí en el blog no. Ya va para una semana que no publicaba y he decidido no reponer esas entradas. No por otra cosa: porque no tiene caso que lean textos «de hoy» que se escribieron una semana después. Y tampoco tengo a la mano muchos materiales «atemporales», de esos que no importa la fecha (como reseñas de libros que vienen o recién publicados).

Sin duda, parte del tema tiene que ver con el taller «Escribe Hoy«. Como saben, habrá sesión presencial el sábado 29 de septiembre. Pero también muchas personas me han sugerido que lo haga virtual. Ya les enseñé el primer ejemplo de ello en una entrada anterior.  Es parte de lo que me tiene ocupado.

No es precisamente desaparecido…

Sin embargo, no es ni el principal ni el único motivo para «no estar». Sucede que hace como un mes me invitaron a dar una conferencia. Luego otra. Basado en ello, me invitaron a una junta de dos horas. Se volvió una de 12 horas -en un día-. Otra media jornada en cierta sede. Un día entero, luego otro. Y así hasta completar lo que va del mes de septiembre.

El detalle es que ese lugar no tiene buena cobertura de Internet. Entra, sale; se pierde. Además de que es un poco como una «central de bomberos»: pones una tarea de rutina en la agenda, para enterarte minutos después que hay una emergencia que atender, Y, al final, sofocas el fuego pero tienes pendiente las tareas que originalmente te planteabas.

Por supuesto, añadan que hay tres libros y un artículo para algunos clientes en proceso. Más mis proyectos personales. Sin contar los viajes familiares (entre los días pasados y los por venir tocan varios). La dieta y el ejercicio. Y viajar en transporte público mucho más de lo habitual.

En fin. No es queja, simplemente comentarles que han sido semanas de dormir unas tres o cuatro horas diarias, sin acceso constante a redes y con muchas tareas «urgentes e importantes» fuera de programa. Pero aquí sigo y ¡Nos vemos el 29 de septiembre en Escribe Hoy! ¿Va?

Comentarios cerrados.