Pase, siéntese. Pero por favor, cierre la puerta, para que podamos charlar de manera despreocupada.
En el último mes y días hemos visto que las posturas comienzan a sentarse, ya vimos que la izquierda en la cámara de diputados no está representada por el coordinador Silvano Aureoles, sino por posturas que se entienden antagónicas y deben estar bajo un mismo color partidista.
Tenemos un diputado Fernando Belaunzarán, critico pero propositivo, que ve que México está por encima de intereses mezquinos y además, reconoce los tiempos en los que el país está por lo mismo la necesidad de tener una agenda de reformas estructurales, bastante clara para sacar temas que urgen desde hace dos o tres administraciones presidenciales.
Y tenemos la postura del diputado Martí Batres, que simplemente le gusta reventar las cosas, cercana a la de Andrés Manuel López Obrador y que tiene por objetivo, radicalizar los debates en pos de intereses personalísimos buscando que dentro de unos meses, quizá haya un cisma en el PRD y muchos vayan como él, detrás de Andrés Manuel López Obrador a MORENA para hacerlo partido político.
¿Ve usted la mano de Rene Bejarano? Muchos también la ven.
Pero si usted cree que en los próximos meses estaremos viendo tomas de tribuna y claro, negociaciones que tengan gastos por encima de los programados entre los coordinadores de los diputados del PAN y el PRD, de antiácido y menjurjes para la gastritis, considere que al diputado Silvano Aureoles también le harán falta, ya que la bancada del PRD en San Lázaro parece estuviera rota y comienza el distanciamiento entre fracciones que sin duda estarán dentro de la institucionalidad del PRD y aquellas que simplemente hacen lo que les viene en gana y no dudan en no tentarse el corazón para reventar cualquier esfuerzo legitimo para mejorar el país.
Necesitamos saber que es lo que esta pasando en la mente de la cúpula partidista del PRD ya que con una postura moderada y legitima como la de Jesús Zambrano esta la que en cualquier momento puede levantarse de la mesa y patear el tablero de fichas de Dolores Padierna en el senado, como secretaria del partido y claro, su esposo Rene Bejarano en la cámara de diputados.
El PRD no lo tiene sencillo, ya que muchos de los radicales son incondicionales a Andrés Manuel López Obrador y quizá estén solamente esperando el tiempo (claro, tontos no son, estarán en el PRD hasta que vean que MORENA comienza a crecer y hacerse partido político para que con sus huestes hagan el caldo gordo y tomen posiciones de poder) para pasarse a Morena como partido político con ya influencia nacional y una estructura en tierra bastante fuerte que pueda siquiera mantenerles el registro en las próximas elecciones tras su registro provisional que logre en el IFE.
Dejémoslo sobre la mesa, ya que aún falta ver muchas más reformas y si la laboral que estaba “planchada” así como la lucha por las comisiones, generaron tanto encono y dificultades, aguardemos el comienzo siquiera del debate a la reforma energética que prevé la apertura de Pemex a la iniciativa privada.
Le veo la próxima semana para que volvamos a plática pero A Puerta Cerrada.