En 1962, nadie sabía si una saga de espionaje podía triunfar en el cine. Los estudios no confiaban en el proyecto. Entonces, un actor semi desconocido actuando de James Bond 007 y un presupuesto ridículo crearon algo que marcó un antes y un después del cine. Aquí está la historia completa:
Es 1961. Harry Saltzman y Albert Broccoli, productores, tienen un problema: Nadie quiere financiar una película sobre un espía británico llamado James Bond.
Los libros habían vendido algo en Reino Unido. La novela original no parecía tener potencial en Hollywood.
Insistieron.
El presupuesto aprobado fue de solo 1 millón. Eligieron a un actor casi desconocido: Sean Connery. Filmaron en Jamaica, para ahorrar costos. Nadie apostaba por ellos.
Se pasaron por U$100,000; United Artists ya pensaba cancelar el proyecto. “Serán puras pérdidas”, decían.
Bond y el Dr. No.
Dr. No se estrenó en octubre de 1962. Contra todo pronóstico, fue un éxito explosivo. Recaudó más de U$59 millones en taquilla. El público amó a Bond. El cine había encontrado a su espía.
25 películas después, seguimos viendo la saga occidental más exitosa del cine.
Y así comenzó la franquicia más longeva y rentable de la historia del cine occidental (en el oriental hay una saga china de 89 películas). James Bond se convirtió en sinónimo de acción, lujo, estilo y peligro.
Escaparate para relojes, autos de lujo y hospedajes. Y cambió para siempre cómo se hacen las películas de espionaje.
Incluso, ha influenciado la realidad: Aunque en México se celebra el Día de Muertos desde la época indígena, no se hacía un desfile como el del inicio de Spectre.
Fue tal el éxito global, que el gobierno de la Ciudad de México empezó esa “tradición”. 10 años después, sigue.
Un Bond, muchos actores.
Después de Sean Connery vinieron David Niven, George Lazenby, Roger Moore, Timothy Dalton, Pierce Brosnan y Daniel Craig. Cada uno redefinió a Bond a su manera. Y todos vendieron millones de entradas (tú el que menos, Dalton, el que menos).
Pero hubo un momento clave en la historia de la saga. Bond, James Bond, estaba muriendo. De aburrimiento. La última peli con Dalton fue un fracaso. (Te lo dije, Dalton: vendiste menos que nadie).
Se necesitaba un cambio no solo de actor: de estilo y dinámica de las películas.
Renovarse o aburrir
Pierce Brosnan entra con GoldenEye y revienta la taquilla: $356 millones. La saga renace. El personaje se moderniza. Y vuelve el glamour, la acción y el carisma.
(Y no, no son escenas de las últimas dos películas de «Misión: Imposible» aunque se parezcan. Pero tampoco son tomas directas: son efectos digitales. Y medio malitos, pero…).
Luego, en 2006, otro giro radical. Un Bond más real, más oscuro, más brutal. Daniel Craig. Casino Royale. $606 millones en taquilla.
La primera novela de la serie, en el primer remake de la saga. Para comparar a gusto. ¡Y vaya que mejoró!
La franquicia toca techo con Skyfall (2012): $1,108 millones. La película más taquillera de toda la saga. Y crítica unánime: Bond estaba más vivo que nunca.
Desde 1962, Bond ha generado más de U$7,000 millones en taquilla. 25 películas. La saga más larga del cine occidental. 7 actores haciendo el papel. Miles de productos derivados, algunos, de altísima gama: autos, relojes de U$20,000… Y una marca reconocida en todo el mundo.
En resumen
¿La mejor parte? Todo comenzó con una novela que casi nadie quiso financiar. Y un actor que nadie conocía. El autor no quería a ese actor en el papel. “Demasiado escocés”.
En las siguientes novelas, hasta le creó un ancestro acorde. La cultura popular cambió para siempre.
Y hablando de novelas que deberían hacerse películas, te recomiendo esta, aunque haya escenas que te harán llorar con profundo dolor, vale la pena. Te gustará. Es de uno de mis autores favoritos.
La lección es simple:
- Las modas pasan.
- Los personajes bien construidos permanecen.
- Tu producto puede cambiar para adaptarse a los tiempos.
- Pero debe mantenerse fiel a sus bases.
- Y, si generas cultura, generas riqueza.
007. Bond, James Bond.
Texto publicado originalmente en el X (Twitter) de Gjsuap en dónde puede verse con más videos de acompañamiento.
