Pocas cosas son más difíciles que creer en ti, particularmente cuándo para el resto del mundo «estás mal», «las cosas no son así» o «lo estás exagerando». Pero a veces, muy a veces… gana la depresión y la desconfianza. «Nunca saldrá bien». «Es imposible». «No puede hacerse» y demás variaciones de ideas negativas te atrapan y derriban. Es en esos momentos en que creer en ti se vuelve lo más importante. Lo que es esencial para llegar a la meta. No creer a las criticas, a las opiniones opuestas, a quienes te atacan porque ellos mismos no se creen capaces. Y entonces los ejercicios de repasar personas que han podido vencer las más increíbles circunstancias hacen que lo tuyo, por comparación, se vea tan menor que se vuelve imposible de fallar. Y entonces empieza un nuevo amanecer, si estás dispuesto a verlo.
Creer cuándo nadie más cree.
Tal vez algo que reforzó esta creencia pasa por dos cosas: de un lado, personas que seguían con «profundo interés» mis proyectos, en particular de libros, en cuánto dejé mi empleo de tiempo completo para perseguir mis sueños jornadas enteras , dejaron de tomarme las llamadas o contestarme. Nada. Cero. Kaput…. Desaparecieron cual si de efectos mágicos se tratara.
Del otro lado, personas importantes para mi han insistido que la idea «no es rentable», que de escritor no se vive y menos en este país, que ser autor en sellos como Amazon, en dónde más allá de un par de días anunciado en las novedades (o con promociones gratis) buscan atraer personas. Tal vez por eso mismo te ponen límites, como que el libro quede en exclusiva para poder entrar a las promociones de promoción gratis de KDP.
Creer cuándo alguien más cree.
En contraste, creer cuándo alguien más cree en tu idea es un refuerzo positivo que ayuda a lograr las metas. Lo comento porque mi buen amigo Ricardo Monroy (@ricardodelrock en Twitter) he generado un disco con música inspirada por «Clara Sandra solía soñar«. Hagan de cuenta que es un soundtrack que acompaña a algunos de los pasajes del libro; y además de rico y variado vale la pena. Porque en cuánto esté publicado, todos los lectores de la novela podrán recibir la música para acompañarla.
Otra persona ya me comentó que está pintando un cuadro basado en la historia de la novela; en cuánto esté listo me lo va a regalar, #dicen. Yo no tengo problemas para recibir regalos. Más importante es el hecho de saber que la historia está gustando y que puede llegar a funcionar mejor con un efecto acumulativo: entre más personas la lean y la recomienden, más libros puedo ofrecer en un ganar-ganar-ganar (gana el lector, gana la empresa y gano yo. Muy buena salida.
Una tercera lectora me ha ofrecido hacer la obra derivada de un guión de cine, porque la historia le ha gustado y cree que puede funcionar también así. No lo dudo. De hecho lo creo posible y deseable. Pero lo mejor es saber que el proyecto empieza a «atraer» ojos cada vez más importantes… y eso me da gusto.
En resumen, hay novedades al arrancar 2016 -o antes- y que espero te gusten. Y es mejor que logres porristas que te apoyen o seguidores que continúen tu camino.. Porque. no lo olvides, «el primero que hace una locura está loco; pero cuándo alguien lo sigue, se vuelve un líder… Encuentra y cuida a tus primeros seguidores, porque son ellos los que te hacen líder». Así que ha llegado la hora de decir «ese soy soy», conseguir quien ayude con la delegación de ideas, y hacer que te crean 😉