Desde los años setenta tenía la costumbre de leer a Paco Calderón y su cartón de los domingos. Salía entonces ilustrando la columna de Marco A. Flota y a ambos los culpo de mi interés por la política y el humor: era fácil recordar cartones y asociarlos a noticias, o juegos de palabras y hacer lo propio. Hoy me entero a través de Monoaureo.com que Paco Calderón cerró su sitio web y dejará de publicar sus cartones en Twitter.
Aparentemente, El Norte y sus filiales Reforma y Mural han prohibido a todos sus colaboradores publicar gratuitamente sus contenidos en la red. La semana pasada cerró su lista de distribución Sergio Aguayo, y el 1 de octubre cerró su sitio Paco Calderón. Y si bien entiendo las razones comerciales de Grupo Reforma para asumir que «ellos pagan por desarrollar ese contenido y, por tanto, es de su propiedad», creo que es una profunda estupidez.
Profunda, porque crean un «mercado de opinión», en la que hay que pagar para ver una opinión valiosa. Por supuesto, eso en si mismo es una opinión: en el sistema de mercado, el que no tiene para pagar no tiene información. Es despreciable. La democracia requiere un debate lo más abierto posible. En países con libertad de mercado más amplia, como Estados Unidos o Inglaterra, hay periódicos o revistas cuyos portales en línea tienen amplias secciones de paga; ni en New York Times ni en The Economist la página de opinión editorial tiene acceso restringido. Al revés, procuran darle difusión y facilidad de acceso: es lo que le da el poder político para influir políticas. Grupo Reforma prefiere renunciar a ello por unos cuantos centavos.
Y estupidez porque, en estos tiempos de redes sociales, prohibir compartir demerita tu marca. Estoy seguro que veremos versiones «pirata» de esos mismos contenidos, sea porque los suscriptores los compartan, porque las síntesis de prensa de organismos y dependencias las incluyan, o porque alguien capture pantallas y las reparta. Como sea, el material se podrá ver, pero sin pagar al «editor» y ni siquiera llevando lectores, publico o beneficios para los anunciantes.
Respetamos que tienen plena libertad para hacer lo que quieran con su modelo de negocios; que tienen derecho a restringir contenido que ellos pagan. Pero es contraproducente. Si tan solo hubieran leído «The Curve» de Nicolas Lovell podrían ganar mucho más dinero con contenido gratuito, al tiempo que ganan más influencia política. Eso es un modelo de negocios del siglo XXI. Pero prefieren seguir siendo un mal remedo de prensa amarilla del siglo XIX. No en balde están con problemas financieros, menos lectores y con la urgencia de subir sus precios: ser un producto aspiracional de élite funciona, pero no mucho: su cuenta de Twitter tiene menos de 850 mil seguidores; Noticieros Televisa 1,400,000, la de El Universal, 2,250,000, y Joaquín López Dóriga, 4,160,000. ¿Por qué es relevante? Porque Reforma fue el primer y más importante periódico mexicano en línea por 8 años; hoy, está fuera de los más grandes. Por privilegiar lo comercial a lo periodístico. Me da pena. Por lo pronto, se derrumba mi hábito de leer a Paco Calderón. Ni modo; lo extrañaré.
Imagen de hoy Seattle Municipal Archives via Compfight
Yo podría decir que al igual que a ti, el "monero de derecha" me formo algo de las ideas sobre política y realidad económica y social que tengo.
Debo decir que a mi me cayó como pedrada, viviendo en el extranjero, que comenzaran a cobrar el acceso a ELNORTE.COM, y debo de decir que lo pagué por un par de meses hasta que me dí cuenta que cada vez dejaban mucho que desear sus contenidos y que ingresaba al periódico solo a ver al monero y a leer una que otra columna de opinon. Pero pudo mas mi aversión a la mala calidad del producto y por supuesto dejé de pagarlo. Comencé entonces a seguir a Paco en su página web. No encontrarla disponible más es bastante triste. Pero EL NORTE no me va a obligar así a comprar su mediocrísimo producto.
Te voy a extrañar Paco.
De acuerdo contigo. Hemos descubierto que, si buscas en Twitter, no falta algún suscriptor que comparta el cartón. En Monoaureo.com no pueden usarlo porque viola el derecho de autor, pero cuándo me entra la abstinencia fuerte, los busco allí. saludos.