Dudas ¿razonables?

Cayó el narcotraficante más buscado, el «Chapo» Guzmán. Y si por mucho tiempo -casi 13 años desde su fuga- se alimentó el mito de que «tenía protección del gobierno», ahora se corre el mito de que «el gobierno rompió su pacto» e historias parecidas. Sucede que las teorías de la conspiración o las interpretaciones exageradas son las que más gustan. Pero… tengo dudas sobre las «dudas razonables» que muchos plantean. Me parecen más bien dudas «dudosas».

El método científico tiene como principio dudar de todo: no se puede tener certeza alguna, y lo que prueban los experimentos no es que algo es cierto, sino que su contrario es falso. Las teorías prevalecientes no son aquellas que se han demostrado ciertas, sino aquellas que no se han podido probar falsas… aún. Así que la duda, como principio, es útil y bienvenida. Pero no siempre: debe ser honesta y aceptar puntos falseables. Por ello recurriremos al principio de la Navaja de Occham. Este principio científico dice que si hay dos explicaciones que son posibles, la más sencilla tiende a ser la verdadera.

«No es el Chapo».

Una de las primeras dudas es que no es la misma persona, que no se parece a las fotos conocidas, particularmente a sus fichas de cuándo fue detenido. Lo cierto es que si llevaba fugado al menos 13 años, y se supone que en el camino se hizo al menos un par de operaciones, es normal que esté envejecido y hasta cambiado. Pero el que no se parezca no implica que fue cambiado: simplemente, han pasado 15 años desde sus fotos de captura. Piensen ustedes en cuánto han cambiado en los últimos 15 años.

«El gobierno lo protegía».

«El Gobierno» no existe. Es una construcción social que nos sirve para organizar la vida social. Hoy, más de 4 millones de personas trabajan en el servicio público. Desde el Presidente de la República hasta los trabajadores de limpia de los municipios. Es punto menos que imposible que pensar que esos cuatro millones de personas funcionan como un ente único de acciones racionales. En realidad, es una masa bastante más complicada. No dudo que agentes «del orden», policías o militares lo protegían. Pero ciertamente no era una protección gubernamental.

«Obama vino a Toluca a pedir su captura». 

Las cumbres de líderes, como la que ocurrió la semana anterior en Toluca son ejercicios normales para tratar de coordinar temas que les interesan a varios países. Ciertamente temas como el narcotráfico o la seguridad se tocaron en las reuniones bilaterales y trilaterales. Pero de eso a sugerir que hay una exigencia puntual y que por eso se hizo la captura, me parece un salto bastante complicado.

«Es un premio a Peña Nieto por regalar el petróleo».

Nuevamente, aunque son dos temas que pueden parecer vinculados, creo que son ajenos. Ni la Reforma Energética es para «regalar el petróleo», ni la captura de un narcotraficante puede considerarse «un premio». Ciertamente, suena muy atractiva la vinculación. O como dijo el líder opositor López Obrador en Twitter:

La detención de Joaquín Guzmán Loera no resuelve el problema de fondo, pero le sirve a EPN y a la mafia del poder para hacerse publicidad

— Andrés Manuel (@lopezobrador_) febrero 23, 2014

Es decir, el tema es «meramente publicitario». No lo creo…

«Fox lo liberó y Calderón lo protegió. El PRI lo detiene porque apoyó a sus enemigos». Esa historia tiene muchos más elementos para sonar cierta, pero tampoco me parece que sea así. Al gobierno de Fox se le fugó, precisamente en víspera de que se recrudecieran las condiciones de seguridad de Puente Grande, el penal en el que estaba recluido. No dudo que, enterado de los cambios, Chapo pensara que o se fugaba en ese momento o estaría perdido. Y para Calderón era necesario detenerlo, pero no pudo hacerlo. Según esto, tres veces lo tuvieron rodeado y tres veces se escapó… por complicidad de algunas autoridades. Eso si suena creíble. Y que el PRI lo persiga por haber sido panista… suena inverosímil.

«Calderón está preocupado y por eso respalda la caída de su socio».

El expresidente salió en Twitter rápidamente a avalar la acción, señalando que fue un cuerpo de elite de la mariana que él preparó quien ha detenido a muchos narcotraficantes, y cuya perseverancia logró la captura del Chapo:

Dicen que fue @SEMAR_mx la que capturó a Guzmán Loera. Felicidades al Presidente Peña, al Srio. @AlmSoberon y a los marinos por este golpe.

— Felipe Calderón (@FelipeCalderon) febrero 22, 2014

Por supuesto que, dado que fue un objetivo que no logró durante su gobierno, la caída del capo era un motivo de festejo.

Hay que recordar que hay tres modelos de operación del narco: El del Golfo, el de los Zetas, y el de los Templarios. En el primer caso, se opera mucho como una franquicia: células locales que usan la marca, y con una visión más de negocio. El segundo se impone por la vía del terror, por ello es muy violento y de alto perfil, participando en extorsiones y secuestros. El tercero apela a una visión social y se vincula mucho con la gente de los territorios en que trabaja: genera base social. Y aunque los tres son violentos y agresivos, el modelo del Chapo era de más bajo perfil, por lo que las acciones de las autoridades lo afectaron menos. Eso no implica complicidad necesariamente, al menos no de alto nivel.

«Lo atraparon porque falló Whatsapp».

Debo reconocer que, de todas las dudas dudosas, esta es la más simpática. Asumir que la única vía de comunicación del narcotraficante más buscado era una sola aplicación móvil… suena increíble. La verdad es que creo que un trabajo de inteligencia de muchos meses estuvo detrás de la captura.

Ahora, aunque algunas de las dudas aquí comentadas vienen de famosos periodistas o activistas sociales, otras surgen de personas que afirman que hay reptilianos entre nosotros -cierta especie de extraterrestres- y de los que afirman que la caída del Chapo es parte de la conspiración global de los Illuminati…

Como sea, creo que hay que dudar de las dudas dudosas y esperar a ver que pasa. Creo que no se extraditará al Chapo, no se les volverá a fugar, y su detención, un triunfo simbólico, no bastará para acabar con el narcotráfico en el país. Pero es, sin duda, un hecho para conmemorar: cayó un peligroso narcotraficante, prófugo por casi tres lustros, y eso es una victoria para las fuerzas de seguridad. Ojalá y sigan muchas más… pero lo dudo.

Imagen de hoy por Dom Dada via Compfight