«¡No te metas con los héroes patrios! Son personajes superiores a ti y a mi y no tienes por qué hablar así de ellos». Bonita frase que, en este mes de la patria, alguien me recetó de fea manera, en ocasión de que se puso a leer mi novela «El tesoro de Cuauhtémoc» y no le gustó.
Le molesta que revise las figuras de Cuauhtémoc y Porfirio Díaz, encontrando paralelismos entre ellos pero, más importante, narrando que son humanos. Esto es, que tuvieron emociones, sentimientos, dudas; que hicieron lo mejor que pudieron en su momento, pero que eso dista mucho de pensar que la historia tenía un lugar predeterminado para ellos.
Vemos en el texto sus emociones, gustos, y miedos. Lo que tuvieron que pasar en distintos momentos de su vida. Las dificultades y dudas que pasaron. Sí, acepto la queja de que no soy historiador: soy novelista. Y eso me da cierta libertad de jugar con los personajes. No tengo que apegarme a libros y documentos: puedo imaginar sus emociones y plasmarlas en palabras.
Héroes patrios: humanos
Por ejemplo, una de las escenas de «El Tesoro…» ocurre entre Porfirio Díaz y su compadre, sucesor y predecesor en la presidencia de México, Manuel González. Ocurrió en la Hacienda Chapingo en 1888. Pueden leer la anécdota en la entrada «Chapingo, principios de 1884» y una versión ampliada en la novela (disponible impresa o en digital en Amazon y Amazon México).
¿Está bien señalar que usaban palabrotas, que se emobrrachaban, que dudaban uno del otro? ¡Claro que si! No son estatuas de bronce y mármol: fueron seres humanos. Tuvieron muchas emociones. Y sin duda algunas de las decisiones que tomaron y que siguen afectando al México contemporáneo, las hicieron al calor de esas emociones o sin reflexionar qué pasaría en doscientos o quinientos años después.
Porque hay que asumirlo: si alguien está más preocupado por su lugar en la historia futura que en su tarea presente, no logrará ni acabar la tarea actual ni tener un buen lugar en el futuro. Y aunque se moleste mi lector, los héroes patrios fueron humanos. ¡Aunque lo duden!
Imagen de hoy: Miguel Hidalgo Bronze por Franco Folin