Este mes, como saben bien los lectores de este blog desde el 2014, Noviembre es el «Mes Nacional de Escritura de Novela» o NaNoWriMo. Y buena parte de los textos del mes reflejan, al menos parcialmente, este gran impulso inicial que implica desarrollar el primer borrador de una novela de 50,o00 palabras en un mes.
No les voy a insistir mucho en ello, por dos razones: a menos de una semana de iniciado, ya voy por arriba de la marca de las 10,000 palabras (como pueden ver en la ilustración de abajo). Eso implica 20% de la meta en cinco días. Si sigo con ese ritmo, la acabaré al menos tres días antes del plazo -y la verdad es que mucho antes.
Recuerdan que el reto mensual equivale a escribir 1,667 palabras diario. Actualmente el promedio es ligeramente superior a las dos mil palabras diarias. A ese paso, debo acabar el 24 de noviembre -casi una semana antes. No está mal, si consideran que el año anterior casi sumé 10,000 palabras los últimos tres días.
También les comento que la meta de recaudación para el mes ya fue superada; aún así, todavía pueden donar e incluir su nombre en los agradecimientos de la novela, recibirla en formato digital o impreso -dependiendo del monto de su donativo. Les recuerdo que los fondos son a beneficio de la Fundación NaNoWriMo y no para mi. Con ellos, fomentamos programas de lectura y escritura para niños y jóvenes en todo el mundo. Pueden donar con tarjeta de crédito o débito en mi página en Classy.
Por último, pero no al final, si ya tienen una novela en marcha, les recomiendo inscribirse al NaNoWriMo. Es gratis y les ayudará a lograr la meta, además de que hay premios interesantes. Y si aún no la tienen, no es muy tarde aún: pueden empezarla hoy y acabarla a tiempo con solo dos mil palabras diarias. Y utilizando el Método Escribe Hoy, pueden lograrlo.
Impulso inicial: pieza clave
Tal vez esta es la principal diferencia entre el impulso inicial de este NaNoWriMo comparado con los de otros años: invité y estoy apoyando a tres amigos a lograr sus novelas. Y con ello, me refuerza mi intención de terminar la mía.
¿Y para qué escribir más libros, si ya no se lee? Creo que Bradbury da la respuesta, aunque las librerías sean virtuales como Amazon y cada vez sean menos los que leen. Aunque les ofrecemos interesantes alternativas como las Visitas Literarias.
No es necesariamente cierto: se dice que Miguel Ángel tenía la mayor fortuna de un artista durante el Renacimiento, e incluso llegaba a las decenas de millones. Lo cierto es qeu vino de mecenazgos y pagos de ricos y famosos. Lo que me recuerda, ¿quieren salir en los agradecimientos de mi novela? ¡Fácil! Donen al NaNoWriMo.
Hay quien me dice que «para ti es fácil escribir una novela en un mes». Ciertamente no lo es -y les presto mis zapatos para que recorran el camino-. Pero ciertamente es cada vez más fácil.
Y aunque Neruda se refería al desamor de una relación que se rompe, también es cierto para la relación entre autores y lectores. Si me leen, estamos unidos para siempre. Si no me leen… nada nos une. Vaya impulso para leer y hacer una relación significativa.
Al escribir diario tiendes a altenrnar posiciones: ¿Me queda un día menos o ya avancé uno más? Y ambas perspectivas son correctas. ¿Cuál te da impulso y cuál te lo quita? Depende de ti.
Imagen de hoy: Tom Parnell via Compfight y postales por @gjsuap.
Pues ahí la llevamos 🙂
No bajes el ritmo