Tengo un amigo que es muy ecuménico en lo que a descanso se refiere… Los viernes descansa conforme a la norma musulmana; los sábados respeta el descanso sabático judío; los Domminum Dei cristianos los respeta descansando el domingo, y rememora a San Lunes a la mexicana, descansando también. Él dice que es ecuménico, yo digo que es perezoso a secas. Ya sé que anda buscando cómo venerar a Marte, Mercurio y Júpiter para descansar los días que le faltan…
Me llama mucho la atención que todas las religiones mayores -y muchas tradiciones filosóficas- tienen normas sobre un cierto descanso obligatorio, y sobre restricciones a los alimentos: hay quienes no comen mariscos, vacas, lácteos, animales no ungulados (sin pezuñas, pues), cerdo, aves, o no beben alcohol o café; curiosamente en prácticamente todas el pan está permitido (y en muchas es parte de los rituales sagrados) y en otras hay normas para su preparación -como la carne Kosher judía, que debe sacrificarse de cierta manera para que no quede sangre en ella-.
Me encontré esta cita sobre el descanso sabático: «Durante nuestro Sabbath nos ponemos a un lado de todas nuestras preocupaciones cotidianas y nos dedicamos a fondo a la literatura, la poesía y la música. Este día nos recuerda que no somos esclavos del mundo. En el Sabbath somos libres del mundo«. Creo que esa visión suena muy acertada, y sin duda ha contribuído a los grandes aportes de los judíos en el mundo. Deberíamos retomarla, cerrar las tiendas y los cines, apagar la tele y dedicarnos a hacer literatura, poesía, música y oración por nosotros mismos, al menos un día del mes.
Cabe destacar que en buena parte de la península Ibérica desde el siglo X y hasta 1492, se vivía un régimen de tolerancia de las ideas (aunque a veces con persecusiones o rechazos a las «razas») en el que árabes, judíos y cristianos podían convivir. De allí surge Alfonso Décimo El Sabio y su «Escuela de Traductores de Toledo», el experto casi enciclopedista Maimónides -quien llegó a decir a sus hijos: «si no alcanza el dinero para comer, compren sólo libros»- y quien creó en la «Guía de Perplejos» un intento plausible por vincular fe y razón, y a cristianos y judíos; e incluso Rabbí Moshé de León, quien escribe allí la versión moderna del Zohar, texto kabbalístico judío (por cierto, hay tres grafías con diferente significado: Kabbalah, misticismo tradicional judío; Cábala, su traducción y reinterpretación occidentalizada, y Qabala, su deformación oscurantista que la tergiversa. Hay que tenerlo en cuenta).
Les dejo aquí la pieza Alif ya Soutani de Salah el Mahdi y compilada en el disco «España Medieval y el legado de Occidente», que les ofrece un poco del ambiente de ese tiempo. Escuchen con atención que no puede decirse exactamente si es árabe, española o judía; tiene elementos integrados, con un aire medieval.
Música: Alif Ya Soultani de Salah el Mahdi
Desafortunadamente, en 1492 se da la reconquista de Granada, la expulsión de los judíos, el descubrimiento de América y la creación primero de España como un reino nacional, y el inicio de la creación de un Imperio Español como el primero realmente global, incluyendo posesiones en Europa, África, casi toda América y Filipinas («En mi reino jamás se pone el sol», llegó a decir su majestad Hispana). Y no sería malo, de no ser que se cerró ese experimento de cooperación y tolerancia que implicó la España medieval, al prohibir en la ley y con la fuerza del Estado nacional toda manifestación religiosa diversa, incluyendo en ello mucho de la ciencia y la filosofía.
Respecto a mi amigo, simplemente es un perezoso… pero creo que hoy más que nunca es momento de COEXISTIR, encontrar los puntos en común y de respetar las diferencias, para volver a vivir en paz. No en balde era el saludo de buenos deseos del maestro resucitado a sus discípulos: «La Paz esté con Ustedes«.
Tolerancia, necesaria en todos los aspectos de la vida y no puede faltar en la comunidad, cualquiera que esta sea, familia, trabajo, colonia, escuela.
Tienes la facilidad de escribir de manera atractiva temas que no son menores y que son importantes.
Nuevamente, gracias por tus comentarios y si, estamos en el proceso de desarrollar "la voz" propia. Espero que el estilo propio pueda crecer al menos al nivel de un Isaac Asimov con sus más de 500 volúmenes en 9 de las 10 categorias del catálogo de Dewey… 😉
¡Saludos!
Felicidades Gonzalo, me gustó mucho tu texto. Celebro a cualquiera que aporte su granito de arena para difundir la tolerancia y la aceptación a la diversidad, sobre todo en cuestiones religiosas. Siempre es un gusto leerte. Si me lo permites, me pienso fusilar la cita que haces al respecto del descanso sabático para publicarla en mi fb… Gracias y felicidades por este texto en particular y por tu blog en general, sumamente interesante, viejo amigo. Saludos.
Con todo gusto, muy bienvenido que compartas el contenido que aquí ofrecemos -y si me regalas una liga de regreso al blog, más-. A ratos pensamos que estamos en un momento "único", donde la posibilidad de convivir se da como nunca antes. Pero no: la gran biblioteca de Alejandría, la España medieval o el periodo de apertura en China entre 1380 y 1430 son ejemplos de que han habido intentos. Y lo mismo, mi buen: son unos cuantos extremistas los que hacen que la coexistencia deje de ser posible. Esta semana que vimos a EE.UU. festejando en las calles la muerte de un enemigo, me hizo sentir más fuerte ese retroceso; por eso el interés de comentarlo.
Gracias por leer, y ¡vamos adelante! Saludos.