¡Alto!
Hay un momento en el que debes decir «alto», «basta», poner un final a las cosas. Y nunca es fácil. Más, cuando el perfeccionismo te persigue y quieres que todo sea prístino e ideal. No, no puede ser así. Hay un momento para parar una búsqueda o una labor, sea perfecta o no. Y mejor si no lo es, porque hay campo para mejorar.
Como autor, uno de los peores momentos es saber cuándo algo está «suficientemente bien». Siempre quieres mejorarlo. Una lectura y otra y otra… Encuentras que el 95% del texto es correcto, dice lo que quieres decir y fluye como debería. Pero… ¿Y si le cambias esta frase? ¿Y si intentas otro enfoque? ¿Y si le mueves esta idea al final de la sección y no en medio, como está?? ¿Y si escribes todo junto separado, y separado todo junto? ¿Y si la frase suena como un cliché, pero por lo mismo conocida y aceptable para el lector…?
Pues les comento: estoy en ese momento, a punto de parar en la edición del nuevo libro del que les hemos comentado. Ya nos llegaron múltiples textos y las revisiones de mi editora (quien, por cierto, hoy cumple años. Gracias por el gran trabajo, Aline (pueden felicitarla en su Twitter: @_Bishu_ ). También llegaron múltiples sugerencias y comentarios, como les anticipé en «Mil gracias«. Y tan pronto estén reflejados en el texto, este mismo fin de semana, estaremos listos para el siguiente paso.
Si, si todo fluye como se espera, el martes o miércoles Amazon liberará el texto y estará a la venta. Tal vez antes. Les mantendré informados. Porque en el dilema de parar o no parar, ha llegado el momento de parar y soltar un texto «suficientemente bueno«, con la ventaja de saber que si algo se descubre después o se puede mejorar, se mejora y punto.
Porque, a final de cuentas, ya hay tres proyectos autorales en puerta: una colaboración largamente trabajada -y que llegó momento de parar los cambios y publicar ya-, una traducción y un texto totalmente original. Así que… manos a la obra. Es momento de parar.
Imagen de hoy (davide) via Compfight cc
