Éxito: ¿Y si me cambian la receta de Churchill?

El éxito de Churchill

El éxito de Churchill

Entre los múltiples atributos que explican el éxito de Sir Winston Churchill como primer ministro de la Gran Bretaña durante la Segunda Guerra Mundial, hay muchos destacados. Pero sin lugar a dudas, la constancia es uno fundamental. Otro es su dedicación al trabajo. Y la capacidad de ser «necio» también.

A final de cuentas, no sólo lideró a su país en algunas de las horas más oscuras de la historia. También ganó el premio Nobel de literatura por sus escritos. Se dice que hacía 8 versiones de sus discursos antes de presentarlos en público. Incluso, recibía a su equipo mientras se bañaba para «ahorrar tiempo».

Claro que no siempre fue exitoso. Mucho tiempo era considerado el más radical dentro de la oposición, al grado que hasta en su propio partido lo veían mal -y se cambió al menos tres veces de bando-. Tal vez por eso, cuándo se requería alguien que enfrentara a Hitler, era él el indicado: por años se había opuesto a negociar con él, a pesar de los deseos de Chamberlein, entonces Primer Ministro. Así que, llegado el momento, ser el único «opositor consistente» le ganó un espacio… que por poco pierde en cosa de meses.

Por supuesto que una vida así no está exenta de errores y fallos. Ya había comentado en esta exitosa serie sobre Churchill y Hitler: ambos fueron soldados en la Primera Guerra Mundial. Y ambos fueron derrotados en ella. Es decir, no todo fue éxito para él.

Churchill, el éxito y el fracaso.

En parte se sabe que su mérito fue impulsar a los ingleses a mantenerse en la guerra, sin rendirse, en tanto que Europa caía. No fue fácil, pero lo logró.  Y tan era el hombre para ese momento, que una vez restablecida la paz perdió la reelección. Es decir, lo creyeron en la guerra, dudaron de él en la paz.

Me acordaba de aquella famosa frase de Churchill: «Éxito es la capacidad de ir de fracaso en fracaso sin perder el entusiasmo». Y sí, en momentos como el actual, en que hay fracasos y dificultades constantes, esa frase me parece clave-. El chiste es no rendirse. Aunque te digan «necio». Aunque crean que estás mal y que «así no se hace». Pero por un momento pensé que esa receta no me gustaba, que requería que me cambiaran la medicina.

Y justo cuándo estaba buscando esa frase, con el ánimo abajo… Me encontré esta otra de noviembre de 2016. Y con eso, recordé que parte del éxito del fracasado Churchill fue su actitud. Volvió el brío para sobreponerme a las dificultades y seguir avanzando. Espero que lo tengan en cuenta también ustedes.

Actitud - Churchill

Imagen de hoy Michael Gwyther-Jones  y postal por @gjsuap

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