La entrada anterior tuvo resultados ambiguos: algunos se quejaron de que era muy negativa y hasta depresiva. Otros me dijeron que se pueden relacionar con lo que me pasó, que les han pasado cosas parecidas y que es interesante que alguien comente los problemas que tiene, porque eso nos conecta más y los hace sentirse «más humanos» y más vinculados a las historias y anécdotas que comentamos. Además, no faltó alguien que me dijera que mi solución les había servido también, y otro me dijo que, al final, di dos consejos y no me decanté por alguno, por lo que «no sirvió de nada leerte». Lo cierto, también, es que fue una entrada con mensos tráfico que otras.
Señales claras.
Pero lo más sorprendente fue ver que, como si fuera respuesta a mi queja, me brincaron en distintos lugares señales claras de que las cosas avanzan y que no debo desesperarme sino asumir la responsabilidad y hacer lo que se tiene que hacer, sin pretextos ni demoras.
Una de ellas fue una entrada del blog de Michael Hyatt. «de nada sirve culpar a otros». (Why it nevers helps to pass the buck). Afirma que una cualidad del liderazgo entre los US Navy Seals (escuadrones especiales de la Marina) es que las personas asumen sus responsabilidades y errores. Si la riegan, asumen la culpa. Punto. Nada de culpar a otros, nada de decir «no es mi responsabilidad» -incluso cuándo no lo es directamente-. Así que asumir la responsabilidad de los errores y fallas es el primer paso para mejorar. En ese sentido, debo entender que si las cosas no salieron bien o no estuvieron antes, es, ante todo, por errores míos. Hay que corregir eso y ni modo.
Otra fue la entrada del blog «El mundo de la ley de la atracción»: «tres mentiras que te dices que están secuestrando tus éxitos» (3 lies you tell yourself that are hijacking your success) que señala tres ideas importantes: decir «no sé por dónde empezar», «no tengo dinero» y «no puedo hacerlo solo» son tres formas de arruinarte la vida. Si puedes vencer esos obstáculos de manera más sencilla de lo que crees, y en la entrada señalan cómo hacerlo.
Y como esos, varios más textos me han brincado en estos días, como si fueran la respuesta a mis quejas. Ya lo que sigue es tornar mi actitud hacia el lado positivo y no dejar de trabajar.
Las cosas avanzan.
Y si, me da mucho gusto ver que, como si fuera de golpe, varios proyectos atorados se van destrabando súbitamente. Libros abandonados, sitios olvidados, ideas que estaban en el tintero… en estos días -prácticamente desde que escribí mi queja de la entrada anterior– se han ido destrabando muchas cosas.
Ya está liberada la edición multimedia de Clara Sandra solía soñar; viene la edición en papel de Lo Mejor de Dichos y Bichos; tres citas cruciales ocurrirán en los próximos días y un par de proyectos más que saldrán durante febrero. Si, las dificultades siguen presentes, pero tal parece que han perdido importancia. Así que… a no rendirse y dar un paso mas, constantemente. Gracias por sus mensajes y por estar al pendiente.
Imagen de hoy contemplative imaging via Compfight