Inocentes

Santos Inocentes

Santos Inocentes

Sigo sorprendido cada vez que se conmemoran «los Santos Inocentes», todos los 28 de diciembre. Se supone que es una tradición que se remonta al inicio del cristianismo, pero tengo un par de comentarios al respecto. Nuevamente, el objetivo es enriquecer la interpretación de la tradición, sin necesariamente atacarla. Les invito a que reflexionemos juntos.

El primero comentario: si creemos que Jesús nació entre el 24 y el 25 de diciembre, que los reyes magos visitaron a Herodes después del nacimiento (en que vieron la estrella), pero no antes del 6 de enero en que encuentran al niño y de allí advertidos en sueños de que no regresen con Herodes, se van cada uno para su casa, no es posible que Herodes, molesto porque no regresaron con él y no los encontró, matara a todos los niños menores de dos años el 28 de diciembre. Es decir: nace el 25, tres días después se hace la masacre, pero los reyes lo encuentran casi 12 días después. Creo que esa interpretación es una acorde a nuestros tiempos de prisas e inmediatez, de celulares e Internet, pero incongruente con el siglo I de nuestra era.

Mi sugerencia es la siguiente: Nace Jesús el 25 de diciembre, en que los magos ven su estrella surgir en el oriente. Organizan sus respectivas caravanas desde África, Europa y Asia, y se encuentran en algún lugar de Medio Oriente, tal vez cerca de Mesopotamia unos seis meses después de iniciado el viaje. Se presentan en la corte de Herodes hacia noviembre, y es para el primer cumpleaños de Jesús que encuentran al niño, no sé si aún en Belén, pero me parece más probable que en Nazareth. Es después de eso que Herodes se da cuenta del «plantón» y organiza la matanza de niños, por lo que la medida aplica para todos los varones menores de dos años: en el momento en que ocurre, lo más probable es que Jesús tenga más de un año y menos de dos, y que sus padres huyeron a Egipto con el oro que les dieron los Reyes como uno de los regalos.

La otra observación es que se suele referir a estos bebés muertos por Herodes como «los primeros mártires del cristianismo», porque con su sangre evitaron la muerte del Niño Dios. Pero para asumirlos como mártires, su sacrificio debía ser voluntario. Y dudo que antes de los dos años tuvieran plena conciencia. Fueron víctimas, si; mártires, lo dudo. Total, que en la fiesta de los Santos Inocentes, deberíamos recordar más bien a las madres (y padres) de los Santos Inocentes, que son quienes, al final, pasaron el mayor dolor de la pérdida de sus hijos, anticipándose a lo que serán los dolores de María al ver ejecutado al suyo también.

Aunque en el antiguo testamento también se habla de Raquel, que llora a sus hijos muertos y cuya maternidad truncada le dio fuerza espiritual para completar su misión. Total, que más que llorar por los bebés, pensemos en sus madres y padres, y lo difícil de esos tiempos. Y ya dejen de hacer «inocentadas»… que la efeméride es mucho más seria de lo que parece.

2 comentarios

  1. Gracias por recordarnos la importancia y trascendencia de esta fecha.Yo no soy mamá y jamás lo seré, pero no puedo concebir un dolor más grande que el de perder a un hijo~bajo cualquier circunstancia y en cualquier período histórico.

    Si ya de por sí eso de las "inocentadas" es de poco gusto (dijera mi abuela), hacerlo sin conocer el referente histórico que las "sustenta" lo es aún más. Estoy segura de que si más gente se sentara a reflexionar sobre ello, lo pensaría antes de hacer sus tontas bromitas: poco creativas, trilladas y repetitivas.

    Inocentes palomitas que, para variar, siguen siendo víctimas de la ignorancia.

    Interesante y oportuno tu artículo. Ojalá que mucha gente te haya leído ayer.

    • Así es; pensando en el trasfondo de las cosas, ves que pasan de ser meras ‘tradiciones’. Lo malo es que muchas veces no observamos lo cotidiano, por lo que deja de sorprendernos. Saludos y gracias por comentar.

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