Ya. Se acabó. Esta es la última entrada que verán en Dichos y Bichos durante la década de 2010. Me recordó mucho al último texto publicado en 2011, primer año completo en que se publicó este blog.
A lo largo de estos casi diez años ha pasado de todo: meses de abandono y meses con entradas a diario; entradas hechas al aventón que han tenido un gran éxito y textos sumamente documentados y relevantes que nadie leyó y siguen durmiendo en el polvo digital, esperando que alguien las vea. Textos de grandes invitados y textos por los que me invitaron a otros medios. De todo un poco.
Sin embargo, lo que predomina son los textos con sabor cotidiano. La reflexiones medio sencillas de cosas cotidianas y simples. El deseo de contar algo ligero, que pueda ser visible por todos -aún sin referencias previas- pero que sea más interesante para los lectores cotidianos.
Me gusta encontrarme con personas que me preguntan por algo… de lo que ya ni me acuerdo, pero que leyeron en el blog y les pareció interesante. En especial a las seis mil personas que durante 2019 (y casi 15 mil desde su publicación original en 2013) han leído «la gota que…«, la entrada más vista durante el año que acaba. Gracias a todos.
Última entrada
Sólo quiero decirles que agradezco mucho el tiempo que pasamos juntos -sea un minuto de una lectura, o las casi 40 horas continuas que le tomaría leer las más de 1,300 entradas disponibles-. Gracias por sus más de 1,100 comentarios a lo largo de esta década. Manejo el término libremente porque el blog se inició en mayo de 2010 (al arranque de la década) y le falta un poquito más para juntar sus diez años en línea.
Gracias a todos por leer, y como dicen que dice Vicente Fernández: «Mientras ustedes sigan leyendo, yo seguiré publicando». (Creo que él se refiere a aplausos y canciones, pero la idea queda clara).
Nuevamente, gracias por acompañanos en Dichos y Bichos. Veremos de hacerlo más interesante aún en la siguiente década.
Imagen de hoy: Last por Ziggy_Mo el 2011-03-13 12:52:14 y video por @Gjsuap.
